Para muchas personas, la actividad sexual es muy importante para lograr un buen desarrollo en la vida, seria inhumano prohibirle a alguien que pueda llevar una vida sexual, en la famosa pirámide de Maslow, el sexo es colocado como una actividad fisiológica necesaria para la motivación humana. Pero hay personas que exageran en llevar una vida sexual, algunos llevan una vida sexual muy intensa y otros llevan un completo libertinaje para llevar sexualidad que trasgrede las normas sociales de la humanidad.
Michel Foucault en “Historia de la Sexualidad: La Voluntad del Saber” nos señala: “En torno al sexo se establece el silencio. La pareja, legitima y procreadora, impone su ley. Se impone como modelo, hace valer la norma, detenta la verdad, retiene el derecho de hablar, reservándose el principio del secreto. Tanto en el espacio social como en el corazón de cada hogar existe un único lugar de sexualidad reconocida, utilitaria y fecunda: la alcoba de los padres”. Lo que Foucault quiere decirnos que la sociedad ha reprimido la sexualidad tan solo a una actividad reproductiva y reservada para el matrimonio, prohibiendo la libre sexualidad o la promiscuidad.
La promiscuidad es un elemento que acompaña a las personas que gustan de una vida sexual libertina, en esta categoría encontramos a las personas que sufren de Hipersexualidad, la cual es un deseo irrefrenable del apetito sexual tanto en los varones como en las mujeres. Se ha comprobado que la hipersexualidad se debe a lesiones en la zona límbica del cerebro, lo mismo por tumores que por desequilibrio de ciertos químicos en esa zona y consumo de ciertas drogas. La Hipersexualidad femenina es conocida como Ninfomanía, mientras la versión masculina recibe el nombre de Satiriasis.
La ninfomanía es una enfermedad psicológica en la cual la mujer sufre un deseo irrefrenable por mantener actividad sexual constantemente, en los viejos manuales de clínica se especificaban dos tipos de ninfomanía, la primera es conocida como “ninfomanía grave”, esta los casos presentan un deseo sexual que llega a dominar la existencia completa de la persona, y el segundo tipo de ninfomanía es conocida como “ninfomanía platónica” la cual se cuando sólo la vida psíquica está a merced del irrefrenable deseo sexual.
La ninfomanía, puede ser vista como una adicción hacia el sexo, pero en realidad se le debería tomar como una esclavitud sexual. La ninfómana (es vista como la mujer de los sueños eróticos de muchas personas) no es una persona la cual se diga es alguien que sea libre sexualmente, en realidad esta es una mujer frígida, la cual va de cacería de hombre en hombre o incluso en búsqueda de mujeres (en caso su apetito sea lésbico o bisexual), porque se haya tan inhibida que no es capaz de tener una descarga sexual satisfactoria.
El termino de Ninfomanía se debe a la mitología griega, en esta se relatan historias acerca de un tipo de mujeres divinas que moran mayormente en los bosques y son llamadas como ninfas, las cuales tenían un alto apetito sexual y eran mayormente poseídas por los faunos o sátiros.
La psicóloga italiana Silvia Vegetti Finzi, conocida por sus obras dedicadas al Psicoanálisis, escribe “Retirada por la objetivación neutralizante de la observación médica, la ninfómana ahora se revela como lo que es, una figura del imaginario inconsciente. Lo que la hace especialmente deseable parece ser la función activa que desempeña en la relación sexual. Frente a su audaz anhelo el hombre se coloca en el polo pasivo de “presa” que tradicionalmente corresponde a la mujer. El varón, imaginándose forzado en la posesión violenta de la otra, de una pareja sexual que sostiene por sí sola todo el peso del deseo, puede sentir que satisface los elementos femeninos de su sexualidad pero sin percibirse inscrito por esto en una posición homosexual. Especularmente la mujer puede representar sus elementos fálicos, penetrantes y posesivos aun estando fijada a una identificación femenina, a una sexualidad vaginal receptora. Se invierten las funciones psicológicas, aunque los intercambios corporales quedan sustancialmente invariables. Como no conoce catarsis, el deseo ninfomaniaco se re-propone perpetuamente como obligación a repetir, en una reiterada búsqueda del objeto que sobrepasa los límites de la necesidad y de la petición. Como búsqueda de amor la ninfómana es una imagen de Eros, del principio de la vida que une a los seres entre sí, pero como figura de la eterna insatisfacción, de la petición coercitiva que no admite respuesta, de la tensión insatisfecha, es una figura de Tánatos, del principio de muerte. La máscara bifrontal de la ninfómana representa, al mismo tiempo, el amor y la muerte, el deseo y la angustia”
Existen diversas teorías de cómo puede surgir la Hipersexualidad o ninfomanía, pero muchas de estas teorías no son aplicables en todos los casos para comprender la aparición de esta en cada mujer, en lo particular yo tengo mi propia teoría, la cual he podido desarrollar en base a diversas conversaciones que tenido con varias mujeres (desde pacientes a algunas conocidas) que gustaron hablar de sexo conmigo, así mismo el cine ha aportado en exponer sobre la vida de las ninfómanas. Empecemos por comprender acerca de dos filmes que explican acerca del origen de la ninfomanía en las mujeres.
El primero de estos filmes es, “Nymphomaniac”, la cual es una película lanzada en el año 2013, este filme fue dirigido por el danés Lars von Trier, en este largometraje se nos narra la vida sexual de Joe, una ninfómana la cual es recogida por un pescador, que la halla tirada y abandonada en la calle, al llevarle el pescador a su casa, esta le relata sobre su vida sexual, lo destacable en esta historia es sobre el origen de la ninfomanía de esta, en el relato ella explica lo rápido y agresivo que fue su primera vez sexual, en la que la protagonista relata que el hombre de su primera vez la penetro fuertemente y a la vez duro poco, para luego empezar a buscar varones y así obtener nuevas sensaciones de placer.
El segundo filme en examinar viene siendo “Diario de una Ninfómana”, película española lanzada en el año 2008, este largometraje se basa en el libro biográfico (del mismo nombre) de la sexóloga y escritora española, Valérie Tasso. Este filme se relata la vida de Val, la cual va experimentando un sin número de encuentros sexuales a lo largo de la historia que la llevaran de ser una mujer exitosa a terminar cayendo en la prostitución por su promiscuidad y alto deseo sexual. Lo resaltable al igual que “Nymphomaniac”, viene siendo la primera vez de Val, la cual se dio con un joven inexperto en el sexo, experiencia que no fue del todo satisfactoria, llevando a la protagonista a buscar amantes que le lleven a tener un buen orgasmo.
En ambas películas, se muestra que el origen de la ninfomanía se debe a una mala primera vez, pero esto no se escapa de la realidad, en conversaciones que he tenido con pacientes y conocidas, muchas mujeres que llevan una vida promiscua y algunas ya diagnosticadas como ninfómanas, muchas revelan que su alto apetito sexual, se debió a malas experiencias sexuales en la primera vez, ya que las personas con las que tuvieron el primer acto de intimidad, duraron poco y otras que la primera vez fue dolorosa, razón que luego de la primera vez ellas, optaron por investigar y experimentar con otros amantes una mejor experiencia sexual, que con el tiempo se volvió o mejor dicho se trasformo en un vicio. Esto puede verse como un indicador para teorizar que al igual que las historias de los filmes el origen de la ninfomanía podría darse por esa mala primera vez.
Quizás muchos lectores se pregunten, pero ¿es malo el sexo?, ¿es malo hacerlo a cada rato?, la verdad no, pero si puede ser malo o al menos dañino, sino te sabes cuidar o al menos si no sabes elegir con quien hacerlo, ya que no todas las personas son sanas, hay personas que son tan promiscuas que no se cuidan y podrían contagiar de enfermedades como el Sida o alguna Enfermedad de Trasmisión Sexual. Por otro lado si eres una mujer que vives de tu imagen personal o como una figura que busca proyectarse como una santa, sería una desgracia te muestren como una prostituta o una mega adicta al sexo hambrienta de hombres para dañar la imagen que deseas proyectar ante los demás.
Mi otra teoría por la que también surge la ninfomanía, va en contra del aspecto sexual, las mujeres que se tornan promiscuas o ninfómanas, no necesariamente puedan atribuir su alto deseo por una mala primera vez, tal vez esto sea un factor pero no la raíz principal del todo, mayormente y de forma inconsciente buscan en el sexo una necesidad de afecto, amor o protección que probablemente en la infancia, no recibieron de la figura paterna, consideremos que la mujer ve en la figura masculina, es decir la figura fálica. Como se puede exponer el “falo” es un símbolo de poder y que puede dar “protección”, al hacerlo con diversas personas en este caso varones, estas mujeres sentirán que son constantemente protegidas por la imagen de un fantasma paterno, algunas mujeres que de niñas fueron sometidas regímenes familiares muy estrictos o a severas represiones podrían desarrollar ninfomanía. Hay que resaltar que la ninfómana que diga busca placer en el sexo, no hallará satisfacción o placer, sino más bien obtendrá una sensación de goce, por tratar de tener una satisfacción que no tendrá realmente, ya que este intento de buscar afecto a través de las relaciones sexuales deja siempre a la persona cada vez más insatisfecha y con mayor necesidad de llenar un hueco emocional.
No obstante hay que considerar que la ninfomanía como la promiscuidad femenina es una forma también de rebeldía contra la figura de la imagen sumisa, que se tiene de la mujer, la cual debe guardar compostura y un recato para no mostrarse como una cualquiera. Cabe decir que hay mujeres que son ninfómanas que proyectan un aire de poder y de rebeldía para demostrar que la figura masculina no puede manejarlas, lo que en lo personal este tipo de mujeres empoderadas por un halo de sexualidad, buscarían en el sexo una forma de venganza contra los hombres.
Por otro lado la ninfomanía puede ser una manifestación secundaria transitoria de algunas enfermedades psiquiátricas, como pueden ser los estados psicóticos orgánicos, en la fase hipomaniaca de la psicosis maníaco-depresiva (bipolaridad), en algunas esquizofrenias y también es parte de algunos trastornos de la personalidad como la personalidad histriónica y el trastorno límite de la personalidad, personalidades que por lo general tienen una libido demasiada alta. En la mayoría de estos estados las pacientes no tienen responsabilidad de los actos sexuales que cometen, aunque muchas están completamente conscientes de lo que hacen.
En la historia ha habido un sin número de ninfómanas, las más famosas, han sido, la reina Cleopatra Mesalina (esposa del emperador romano Claudio), la reina española Isabel II y Paulina Bonaparte. La reina Cleopatra, como se menciono en el capítulo de Masturbación y Sexo oral, fue conocida por ser una gran adicta al sexo oral, los griegos llegaron a apodarle "merichane", "boquiabierta" o "la boca de los diez mil hombres". La emperatriz romana Mesalina, fue famosa por su alto apetito sexual, llegó a prostituirse en el barrio de Subura bajo el apodo griego de Lycisca (mujer-loba). Según el cronista Plinio el Viejo, Mesalina, orgullosa de su legendaria lascivia, lanzó un reto al gremio de las prostitutas de Roma: las insto a participar en una competición, competencia que organizo en el palacio imperial, aprovechando la ausencia del emperador Claudio, quien se hallaba en Britania. Dicho desafío consistía en saber quién podía atender a más hombres en una noche. El certamen daría inicio al anochecer, y a él asistirían muchos hombres importantes de la corte, además de otras damas a las cuales Mesalina había convencido de participar. Las prostitutas aceptaron el reto y enviaron a una representante, la prostituta más famosa de Roma, una siciliana llamada Escila, cuyo nombre era el mismo que el del monstruo femenino citado por Homero en La Odisea, el cual se tragaba enteros a los hombres que tripulaban los barcos que pasaban por el estrecho de Mesina, Italia, siendo el apodo obviamente una clara alusión a la capacidad sexual de la prostituta. Aquella noche, después de haber sido poseída por 25 hombres, Escila se rindió y Mesalina salió victoriosa, pues superó la cifra al llegar al amanecer y seguir compitiendo. Según se dice, aun después de haber atendido a 70 hombres no se sentía satisfecha, llegando hasta la cifra increíble de 200 hombres. Cuando Mesalina pidió a Escila que regresara, esta se retiró diciendo: "Esta infeliz tiene las entrañas de acero". La reina española Isabel II, la cual no era mujer muy agraciada físicamente, fue conocida por un haber tenido un sin número de amantes, los cuales fueron súbditos y guardias, Paulina Bonaparte, hermana del emperador Napoleón Bonaparte, fue una adicta al sexo de vida bastante triste pues había contraído matrimonio con un hombre dotado de un pene minúsculo. Tal fue su caso que decepcionada y quizás en exceso furiosa por su frustración de su matrimojnio, pronto se puso a buscar un amante que tuviese un atributo del mismo tamaño que su apetito carnal. La historia refiere que si llegó a conseguirlo y que lo cogió con ganas al parecer, por que los médicos franceses le dijeron que su útero se hallaba debilitado por el constante trajín sexual con su amante de gran miembro.
La Hipersexualidad masculina, conocida también como Satiriasis, es similar a la ninfomanía, pues en esta los sujetos varones, tienen un alto deseo y apetito sexual. Muchos sátiros puede decirse cuando no logran satisfacer su deseo sexual llegan al punto de violar cuando se hallan desesperados con el fin de satisfacer su necesidad de tener sexo.
El termino satiriasis debe también su origen a la mitología griega, en esta se relata historias de un tipo de espíritus de la fertilidad y de los bosques, los cuales tenían el cuerpo de un hombre, cuernos y piernas de cabra, estos seres reciben el nombre de sátiros, los cuales poseían un alto apetito sexual y por lo usual buscaban tener sexo con las ninfas. Estos seres vivían en una alegría desentrenada y descontrolada que en ocasiones era posible que llegasen a enfadarse e incluso volverse violentos. Sus pasatiempos consistían en beber, bailar, tocar la pandereta, la flauta, perseguir y acosar a las ninfas hasta conseguir seducirlas y poder intentar mantener relaciones sexuales con ellas. Les gustaba disfrutar de los placeres físicos de la vida, en especial del vino y las mujeres. Debido a su gusto por el vino a menudo aparecían sosteniendo copas y aparecían en la decoración de vasijas y vinajeras. Eran los compañeros habituales del Dionisio (dios del vino), aunque también suelen aparecer representados como seguidores de Pan, semidiós de los pastores y rebaños.
En la historia narrada por la "Metamorfosis", de Ovidio, la ninfa Syrinx (la cual era seguidora de la diosa Artemisa y había hecho votos de castidad) fue perseguida y acosada por un sátiro. En respuesta a sus plegarias, Artemisa transformo a Syrinx en un cañaveral y así consiguió escapar del sátiro, en tanto que el, presa de la frustración, confeccionó una flauta con las cañas y con ella, ejecutó una melodía de cacería. Otras versiones del cuento dicen que fue el dios Pan, transformado en sátiro, quien siguió a la ninfa, y que ante la negativa de esta a mantener sexo con él, este la transformo en un junco con el que posteriormente creo su más famosa flauta
Existen diversas teorías de porque podría aparecer la satiriasis en la vida de los varones, esta mayormente logra aparecer en la infancia, especialmente en la etapa fálica, la cual como ya se ha dicho, el niño o perverso polimorfo, se halla en una fase de conocer su cuerpo, lo cual es normal que realice practicas de juegos masturbatorios. Lo que podría generar una posible causa de satiriasis, tal vez se deba a una censura hecha por los padres para impedir que el niño explore su cuerpo o mejor dicho se masturbe, esto llevaría al niño, un tiempo después (probablemente en la adolescencia), a querer seguir experimentando nuevas sensaciones sexuales en compensación a la censura que fue impuesta por los padres, esto también para evitar la castración total, por lo que luego con el tiempo ya mayor libertad practicaría actividades sexuales sin miedo a ser censurado, lo cual le llevarían por una adicción a la sexualidad. Debo decir que la curiosidad infantil cuando es reprimida, motivara al niño a insistir, porque todo lo que sea prohibido será excitante para cualquier niño, e incluso para un adulto.
En la historia notamos han existido notables promiscuos y sátiros, los más famosos por mencionar han sido el emperador romano Calígula, el rey francés Enrique IV, el rey español Felipe IV y el político estado unidense Benjamín Franklin. Todos son ejemplos de los muchos hombres promiscuos y cargados de un apetito sexual irrefrenable que ha tenido la historia. Para comenzar el emperador romano Calígula fue famoso por armar orgias y lleva un alto desenfreno sexual, los reyes Enrique IV como Felipe IV, fueron reyes que tuvieron una infinidad de hijos regados en sus reinos, mujer que hallaban en el camino era sinónimo para tener sexo con ellos. Con respecto a Benjamín Franklin, este fue un notable político americano (conocido por inventar los lentes bifocales) fue un gran visitador de prostíbulos, incluso fue miembro del Hellfire Club de sir Francis Dashwood (político y miembro del Parlamento Británico), en dicho club se bebía alcohol y se tenía sexo con las mejores prostitutas del país, cabe decir en dicho club se hallaban una infinidad de sátiros.
Una posible razón por la que muchos hombres pueden padecer de satiriasis, más allá del hecho de tener placer, los sátiros, buscan proyectar el poder del falo sobre las mujeres, así como también buscar nuevas posibilidades de tener diversas sensaciones eróticas, es ahí que muchos terminan por caer violando mujeres, pues el sátiro necesita proyectar su fuerza viril sobre cualquier persona. El sátiro para la psicología forense en tiempos de encierro solitario, practicara la masturbación, en caso se halle en confinamiento con algún compañero de celda, podría practicar la homosexualidad situacional, incluso violar a este, también el sátiro puede llegar a practicar la pederastia y la zoofilia, la necrofilia y diverso tipo de parafilia, en caso requiera o sienta la necesidad de hacerlo. Muchos sátiros fantasean con la idea de vivir una vida sexual desenfrenada ligada a orgias o relaciones de tríos, el sátiro ve en la figura del otro una imagen de de objeto de placer o mejor dicho un objeto para el placer.
El sátiro como la ninfómana, son esclavos del sexo, pues estos se hallan presa de las cadenas de sus propios deseos, se rigen al principio de placer, rechazando todo principio de realidad, que le llevara por experimentar pulsiones tanáticas que en vez de generarles placer, les conducirá por experimentar el campo del goce, logrando en ellos elevar sus ansias de no poder satisfacer su libido. Cabe decir que “la mujer da sexo para recibir amor y el hombre da amor para recibir sexo”, notamos que esta sentencia hace una alusión a la ninfomanía y la satiriasis, muchas ninfómanas ofrecen sexo para de ese modo recibir el amor el cual no tienen, mientras que los sátiros engañan a sus parejas mostrándose como seres románticos, preocupados por su pareja, cuando en realidad solo buscan desfogar sus bajos instintos, por medio de la actividad sexual, el sátiro no reconoce su enfermedad, porque ven en el sexo una forma de experiencia, tanto la ninfomanía como la satiriasis son enfermedades neuróticas.